Además de las plantas de Asclepias (curasávica
y physocarpa)
que había conseguido como hospederas para la mariposa
monarca, hace un año también sembré tres tipos de pasifloras.
Hojas de Passiflora adenopoda. |
En el libro “Guía de plantas hospederas para
mariposas” de German Vega ( Editorial
INBio), se describen más de cien plantas, incluyendo otras pasifloras.
Parece que la mariposa Euides isabella, también gusta de las passifloras
para criar sus larvas, pero hasta ahora no he visto ninguna en mi
planta.
Nectarios en la base de la hoja. |
Las hojas de un color verde claro, sin brillo, están
cubiertas por diminutos pelos, por lo que fácilmente se adhieren a la ropa.
Están divididas en 5 lóbulos, pero los laterales se notan menos. En la
base hay dos nectarios fácilmente
visibles como dos pequeños hemisferios de 1 mm de diámetro y un definido centro
oscuro.
Los pecíolos pueden alcanzar los 9
cm y en su base hay dos estípulas,
u hojas reducidas de unos 5 mm en las hojas sazonas. Pero en las tiernas hay
además una doble estructura que semejan pequeñas lancetas, desde donde sale
una pareja de pedúnculos
para sostener las flores y que luego crecen alejándose, quedando como a la mitad de aquellos.
Dos etapas de la flor de Passiflora adenopoda. |
Miden unos 5 cm de diámetro y son realmente hermosas. Inician como un pequeño cono truncado, compacto y robusto en su base y delicado hacia la
punta. Mientras se mantiene cerrado su color es verde
tierno muy claro, sin embargo se puede
apreciar que en su interior es blanco. Se abre en las mañanas y se cierra en la noche.
Llama la atención que su
interior es similar a un ojo humano (cuando estamos sorprendidos o asustados nuestros
párpados se abren más de lo acostumbrado dejando más expuesto el ojo y podemos
observar la pupila, el iris, hasta las pestañas). La parte interna de la
flor está compuesta por un círculo de unos 50 finos filamentos erguidos
y muy abiertos hacia el exterior, con diminutas pero bien definidas
franjas alternadas de colores morado y
blanco.
Lo que definiríamos como el iris y la pupila
en un ojo esta flor tiene el mismo diseño, todo en color blanco, porque después de los filamentos hacia el
interior hay una serie de bastoncitos
blancos colocados todos en dirección al centro;
son pequeños y aproximadamente 45 bastoncitos.
Para admirar aún más la complejidad de esta flor, en la base donde se despliegan estos tallos existe como una diminuta almohadilla en
forma de moneda, de color verde claro,
parece que tiene adherido otro tallo y uno de sus extremos se ramifica en dos, simulando la letra “Y”.
Son de color blancuzco con leves manchitas de color morado (que solo se aprecian con una lupa) y en cada punta de esta letra hay una bolsita también de color blancuzco. Cabe destacar que esta “Y” está colocada de tal manera que no chocan con sus compañeras de color naranja.
Son de color blancuzco con leves manchitas de color morado (que solo se aprecian con una lupa) y en cada punta de esta letra hay una bolsita también de color blancuzco. Cabe destacar que esta “Y” está colocada de tal manera que no chocan con sus compañeras de color naranja.
Las semillas (unas noventa por
fruto) tienen forma de gota (3 x 2 mm), oscuras, no lisas sino cubiertas de
pequeñas pelotitas grisáseas de unos 0,1 mm de diámetro. Están envueltas en una
pulpa anaranjada (un buen colorante natural) y ácida, con sabor algo parecido
al maracuyá.
Si le interesan unas semillas (aún no sé si
son fértiles), envíeme un comentario y de alguna manera nos ponemos de acuerdo
para entregárselas.
Referencias adicionales:
Flores de pasión.
Flores de pasión.